Nos dejó no hace mucho tiempo la chica yeye, la bailarina de pim, pam, pom fuego, Santa Teresa, todas eran la misma persona en distintos personajes, la inolvidable Concha Velasco; como la elegante Marisa Paredes que fue La flor de tu secreto o Eusebio Poncela que nos dejó una trepidante Ley del deseo entre muchos otros trabajos, son algunas citas de actores relevantes, porque la verdad es que se nos han muerto muchos.
Compositores como Manuel de la Calva integrante del Duo dinámico, responsable de tantos éxitos de Julio Iglesias con una dilatadísima carrera; se me viene a la cabeza "Resistiré" todo un himno en malos tiempos, ¿recuerdan?
La fantástica voz de Rocio Jurado, la de Camilo Sexto también se apagaron. Robert Redford ya no dará más golpes ni vivirá el gran Gatsby en Long Island tampoco regresará a aquella granja en Memorias de África.
La lista sería muy larga, repleta de personas que nos han dejado como ahora se dice. La última en marcharse ha sido Claudia Cardinale, a menudo rememoro aquel baile en el Gatopardo de Luchino Visconti aunque rodó 59 películas, ahí es nada.
Un día todos seremos solo un recuerdo no obstante no es el mismo el que dedicamos a personas corrientes pero no menos importantes para nosotros que aquellos de dominio público, éstos de alguna manera los sentimos como si fueran de nuestra familia aunque no los hayamos conocido personalmente; gracias a sus interpretaciones nos han hecho soñar, evadirnos, descubrir mundos deslumbrantes de otras épocas o de nuestro tiempo en algunos casos pero también en historias mezquinas, inquietantes...en otros pero nunca indiferentes, a veces nos han producido admiración, rechazo, fascinación.
En cuantas ocasiones tarareamos una melodía determinada porque nos transporta a un momento placentero con ese fondo musical pero podría ocurrir que fuese una obra de teatro, de danza, una película, un cuadro..., por supuesto todo ello es extrapolable a otros ámbitos como el deporte, la ciencia, la economía, la política, en los cuales hay personas que descollán que son relevantes, ganándose nuestro reconocimiento.
Con frecuencia dicho agradecimiento se produce al final de su labor, de su vida o después de su muerte, yo preferiría que los protagonistas lo disfrutaran en vida.
Volviendo al principio Angélica el papel que encarnó Claudia Cardinale en 1963 en el Gatopardo le va que ni pintado.
Descanse en paz.
GREGORIO GIGORRO
Dibujo 2022
En Aranjuez a 28 de septiembre de 2025