domingo, 2 de agosto de 2015

El último baile



Bailaban ellos solamente, desplazándose en círculos sobre la pista, el resto les miraba; hacían buena pareja, a pesar de todo sonreían a la vida. En otras ocasiones iban al mismo lugar a darse un chapuzón, nadar  y ver a través de las cristaleras el centro de la ciudad desde arriba, les encantaba.

Estos y otros recuerdos enternecían a su memoria; al cabo del tiempo el Hotel Plaza sito en la de España, se cerró a cal y canto, esperando de pie al mejor postor.

El imponente edificio junto con la Torre de Madrid, con preciosas vistas desde su azotea, forman un conjunto, levantado por los Otamendi, en los años cuarenta, en el último tramo de la Gran Vía; de clara inspiración americana aunque les salió más chatos que los modelos mencionados, hasta su nombre nos habla de Nueva York, ¿quién no recuerda el reencuentro entre Barbra Streisand y Robert Redford a la puerta del Plaza neoyorquino.

La combinación entre la piedra y el ladrillo además de incorporar elementos decorativos del lejano barroco, le dan un aire más madrileño y le quitan pesanted. Los nuevos dueños han decidido su  transformación total dejándole en cueros al igual que se hizo con el Español de Crédito para convertirlo en hotel de lujo; ambos edificios estaban protegidos y clasificados, eso no les ha impedido lo que están llevando a cabo sin importarles las protestas de arquitectos y decoradores mayormente.

Extraña forma de preservar el patrimonio de un lugar, dejándole sin sentido, sin gracia, simplemente una fachada.

De entrada se pretende preservar el exterior, aunque se rumorea que aumentará considerablemente la altura del inmueble. El perfil del barrio cambiará, actualmente desde la Plaza de la Armería del Palacio Real se ve el sombrero de la torre susodicha sobre la residencia regia, subiendo más plantas será más ostensible la presencia del nuevo edificio.

Siempre se habla de puestos de trabajo, importantísimo, pero también de sostenibilidad; de armonía con el entorno, a la luz de los acontecimientos no tanto. ¿Dónde se encuentra la medida de las cosas?, estará muy escondida, por lo que se ve.

La avidez humana no tiene techo ni parangón; si para conseguir los fines hay que cambiar lo que haga falta invalidando o distorsionando lo anterior, hay personas que no se paran mientes.

Sería deseable cambiar de sones, que los hay, no se debe decir donde digo Diego, dije digo, o algo así.

GREGORIO GIGORRO
GREGORIO GIGORRO
"La plaza de Callao"
Óleo sobre madera
Firmado y fechado en 1999
Medidas: 30 x 58,50 cm



En Aranjuez a 2 de agosto de 2015


martes, 28 de julio de 2015

Tómate


Ponte el mundo por montera,
no te tomes la vida en serio,
es muy aburrida, no merece la pena.

Por eso, tómate un respiro,
tómate una copa, si te sienta bien,
celebrando que eres un superviviente del día anterior;
tómate un asueto, dale vacaciones a tus preocupaciones.

O mejor vive de vacaciones, disfrutando con lo que hagas,
lo demás es puro purgatorio.

Tómate un tentempié al sol  y de paso,
te aprovechas de su calor;
tómate el tiempo que precises para saber lo que te pasa.

Tómate un tomate, tómate un sorbito de desparpajo,
tómatelo a guasa para ver lo que pasa.

Toma que toma y toma.

Tómate la vida de todo, menos en serio,
al final, nadie sale vivo de ésta.

Toma que toma y toma...tomate.

GREGORIO GIGORRO
"Máscara"
Cartón fallero
Acrílico
2000




En Aranjuez a 28 de julio de 2015


lunes, 27 de julio de 2015

El órgano



El sol caía plano sobre sus cabezas, mientras avanzaban lentamente sobre las losas del patio de los reyes, apropiado nombre para el lugar.

Recorrían con sus ojos el magnífico conjunto, en el centro, la enorme cúpula escoltada por las torres a cada lado de ésta, ningún despliegue decorativo, solamente en la parte superior de la fachada, lucían las esculturas de los reyes de Israel; la sobria y pura linea del renacimiento español reinaba a lo largo y ancho del espacio.

Entraron en la basílica, gozando en silencio de la majestuosidad del templo. De pronto sonaron solemnes, los acordes del órgano, cruzaron sus miradas vidriosas, rememorando aquel día, también caluroso; cuando ante aquella música, él se movió por primera vez en el vientre de su madre.

Fue maravilloso, emotivo, emocionante; la vida respondía a la llamada del arte. Sin duda recordar aquella situación fue doloroso para ambos, no obstante continuaron paseando por los jardines a la sombra de la mole del monasterio, mientras el sol ajeno a todo, brillaba desde lo alto.


PILAR CUNS
En la casita de arriba
San  Lorenzo del Escorial
Domingo, 26 de julio de 2015


En Aranjuez a 27 de julio de 2015

sábado, 25 de julio de 2015

Pórtico de la Gloria


Qué no daría yo, por haber asistido este año al jolgorio, al derroche de color y alegría en la plaza del Obradoiro, presidida por la teatral y majestuosa fachada de la catedral compostelana.

Qué no daría yo, por subir la escalinata, pasar bajo la fantástica bienvenida de una legión de músicos sonrientes tocando un sinfín de instrumentos musicales con el Señor mayestático en el centro del Pórtico de la Gloria, nada menos.

Por recorrer la desnuda nave inundada de incienso, desparramándose del brasero gigante más increíble del mundo, sentir el olor de los cirios y la luz de los ventanales con el templo a rebosar; por estar presente durante la ofrenda al Apóstol, que por cierto se viene celebrando desde 1643 cada 25 de julio y después poder dar un abrazo por detrás del altar al Santo.

Desde el siglo XII, las peregrinaciones fueron aumentando sin parar poniendo en contacto modos de vida de aquellos romeros de muy distinta procedencia que llegaban hasta la tumba del Apóstol; el camino ha sido y es un trasiego de ideas, de cultura, de arte; una de las regiones vinícolas más importantes de nuestro país floreció a la vera de éste, la mezcla de costumbres, el auge del comercio..., también lo hizo posible.

La primera ruta turística europea fue el Codex Calixtinus, que no se nos olvide, como tampoco debemos dejar caer en el olvido que una vez desaparecido el imperio romano desde el siglo IX con Carlo Magno, se tuvo la idea de una Europa unida a partir del cristianismo pues era lo único común a todo el continente.

Bon dia a todos los gallegos en particular y al resto de los españoles y foráneos llegados a esa ciudad tan hermosa, para disfrutar de una jornada especial.

Feliz día de Santiago, Patrón de las Españas; como también les deseo a aquellos gallegos que agasajan al Santo en Nueva York por ejemplo, desfilando tan señalado día por la octava avenida, aunque estén lejos de su tierra, casi na y no soy de Cádiz, aunque no me hubiera importado serlo.

GREGORIO GIGORRO
GREGORIO GIGORRO
"Bodegón con manzanas"
Óleo sobre lienzo
Firmado  y fechado en 1980
Medidas: 35 x 27 cm





En Aranjuez  a 25 de julio de 2015

jueves, 23 de julio de 2015

Avila



La muralla la circunda completamente, la protege, la convierte en una ciudad recoleta y a vista de pájaro parece una maqueta. En el interior atesora una montón de conventos, iglesias y palacios recios, sus calles vieron pasear los desvelos de Santa Teresa, insigne doctora de la iglesia; precisamente este año se conmemora el quinto centenario de su nacimiento, con una nutrida representación de su vida en exposiciones que se pueden ver aquí y en Alba de Tormes.
 
Avila es un auténtico patrimonio para la humanidad. Su catedral alberga un espacio soberbio, muy personal, el trascoro es una delicia renaciente labrada en piedra, el retablo mayor un sueño de Pedro Berruguete y otros pintores del quince. A extramuros encontramos la iglesia de San Pedro tan armoniosa  de proporciones como majestuoso es el  monasterio de Santo Tomás, ejemplo del primer renacimiento; cuenta con tres claustros muy hermosos de arcos rebajados y austera decoración. La iglesia de una sola nave, con el altar subido coronado por un magnífico retablo renacentista, desde el coro a la misma altura que aquel, los Reyes Católicos asistían a la misa cuando descansaban en los pabellones reales del monasterio.
 
Bajo el altar, yace el túmulo del príncipe Juan, fallecido en 1497 a los diecinueve años de edad, elegantísima obra en mármol de Carrara, del italiano Fancelli y por cierto no contiene los restos del único hijo varón de los monarcas, debido a las  tropelías del ejercito francés.
 
Tomamos un respiro antes de continuar, en una pastelería de la plaza de Santa Teresa, conversando con la dueña, nos comentó que no lograba acostumbrarse al mamotreto colocado al sur de la plaza y erigido por Moneo, justo enfrente del establecimiento; dicho edificio prácticamente deshabitado, ha desgraciado un espacio agradable, por sus proporciones desmesuradas con respecto a todo lo que le rodea.
 
Es penoso que el buen gusto nos haya abandonado en aras de la presumible ganancia rápida, Avila no se puede permitir tales desmanes, en el mismo sentido cerca del rio Adaja se construyó, no hace mucho tiempo, un palacio de exposiciones cerca de la muralla y de los cuatro postes, donde se dice que la Santa se sacudió el polvo antes de partir.
 
Si a un lugar se le distingue como patrimonio de la humanidad debe preservarse éste, eso como poco, si además se vive de cara al turismo, este año la afluencia de visitantes está batiendo records, habría que poner más celo en el embellecimiento de las ciudades con este distintivo sin menoscabo del resto.
 
En fin, continuamos paseando, recorriendo los conventos de San José, primera fundación carmelita, el de Gracia y el de la Encarnación; nos topamos con la austera basílica de San Vicente, construida sobre el lugar del martirio de Vicente, Sabina y Cristeta,  de románico pleno pero con tímidos guiños al gótico que venia empujando desde Francia. Una sonrisa del ángel anunciando la venida del Señor a la Virgen sobre las jambas de la puerta del crucero sur, nos recuerda al maestro Mateo en la lejana Compostela. ¡ Qué mejor despedida que alguien te sonría desde la fría piedra y después de tanto tiempo!
 
GREGORIO GIGORRO
En la plaza de Santa Teresa
Avila




En Aranjuez a 23 julio de 2015
 
 

sábado, 18 de julio de 2015

El camino


Será este calor que te anula los sentidos,
además de este cielo opaco que calienta el asfalto,
quizá, tus pies se arrastren por el duro pavimento plagado de inmundicia.
 
A lo mejor, te impide ver las diminutas flores que crecen
entre las llagas de las losas,
puede que no hayas llamado
con fuerza a las puertas que se resisten a abrirse.
 
Sin embargo, sigues sin cejar en el intento porque sabes
que te has trazado tu propio camino,
sea cual sea.
 
Si a pesar de todo no lo consiguieras será una pena,
pero si te cansas tirando la toalla será mucho peor.
 
Continua, descansando cuando te agotes,
pero después, ve marcha atrás,
tomando con fuerza carrerilla para ir hacia adelante;
ya no hay vuelta de hoja, porque llevas recorrido un buen trecho.
 
Ánimo y coraje; para una persona valiente sólo puede haber puertas abiertas,
el único problema es saber encontrarlas.


GREGORIO GIGORRO
"Serie el circo"
Modelo para bandeja.
Año 2008





En Aranjuez, a 18 de julio de 2015

jueves, 16 de julio de 2015

El sur


El cielo plomizo parece arder sobre la llanura yerma, aunque sembrada de naves industriales a ambos lados de la autopista, desierta a las tres de la  tarde pasadas; no hay un alma.
 
Toman el camino de servicio, paralelo a la vía, al poco tiempo de incorporarse ven a un chico, de unos diecisiete años, delgado, moreno, con indumentaria deportiva y una bolsa de lona en ristre.
 
Le adelantan, pasados unos veinte metros, se detiene en seco el automóvil; él se apea, le llama agitando una mano; el joven en un santiamén está delante del vehículo.
 
"Vamos a Ocaña", le dice el hombre; no es mucho pero menos da una piedra, continua; "vale, voy con ustedes", le responde. Ella se encuentra perpleja, intentando desentrañar ese impulso, esa manera de actuar tan temeraria de su marido.
 
Él les mira sereno, se corta el calor, se siente el sudor de sus cuerpos.
 
¿Qué haces por aquí, con la que está cayendo?, el chico le responde: "Pues antes que nada, agradecerles su gesto, esto ya no es normal en nuestro país; me dirijo hacia el sur, ¿en Ocaña hay estación de tren?, creo que si, le dice el conductor, sino la hubiera, te acercamos hasta donde la haya.
 
Ahora el sorprendido es el viajero, ¿porqué?, le pregunta, ¿y porqué no?, le responde el conductor.
 
 
GREGORIO GIGORRO
GREGORIO GIGORRO
"Mirando al mar"
Gouche sobre papel
Firmado  y fechado en 1997
Medidas:28 x 19 cm



En Aranjuez a 16 de julio de 2015