domingo, 26 de abril de 2015

El susto


El olor a hierba recién cortada, se mezclaba con el de la gasolinera cercana, cruzó la carretera con paso rápido, tomó el paseo de los olivos, disfrutando de la fragancia del romero y por fin llegó a la piscina municipal; siempre quería ser la primera, era impagable cortar con suavidad el cristal transparente, límpido del agua, además temprano estaba más fría, eso le tonificaba.
 
Se despojó en un pis pas del pantalón corto y las zapatillas,  al aproximarse, se quedó lívida, sin habla; un cuerpo varonil joven flotaba, permaneció un rato observando al cadáver, sin mover los labios, ajena a los devaneos sonoros de los pájaros, al ruido de los coches.
 
¿Quién era aquel hombre? Se dirigió a la recepción comunicando lo sucedido, mientras que llegaba, intentaba buscar y rebuscar en su cerebro aquella cara que esbozaba una leve sonrisa, pues no le era desconocida, ¿Dónde la había visto antes?
 
Dio al conserje su número de teléfono, indicándole que estaría en el bar de enfrente, por si pudiera ser de ayuda a la policía, que sin duda llegaría en un santiamén al lugar, pues de ese tipo de sucesos había que desembarazarse lo antes posible ya que no daban buena prensa a ningún sitio.
 
Al mismo compás que movía el oloroso café, su cabeza daba vueltas  y más vueltas, hurgando en sus recuerdos.
 
GREGORIO GIGORRO
GREGORIO GIGORRO
"En su mundo"
Acrílico y tinta sobre cartón
Firmado y fechado en 2015
Medidas: 33 x 24 cm




En Aranjuez a 27 de abril de 2015