domingo, 1 de diciembre de 2019

El botín

Y entonces llegaron ellos, le sacaron a empellones, le introdujeron en un coche que arrancó a toda leche, desapareciendo entre la niebla. En el interior un tuerto gordinflón que respondía entre los de su calaña al mote de mascachicles armado con una navaja considerable, amedrentaba al secuestrado.

- Te voy a rebanar el gaznate- mientras el otro le decía sonriendo dejando entrever su dentadura postiza con alguna pieza de oro.

-Tú nos vas a decir donde está el dinero, verdad-

Nico no podía imaginar como habían dado con él después del atraco al banco habiendo pasado tanto tiempo; tenía un susto de muerte, no había escapatoria.

Llegaron hasta una urbanización de las afueras, quiero y no  puedo, callejearon hasta llegar con una casita discreta situada en una calle chica, poco iluminada.

No le quedaba otra, mascachicles y el verdugo se cobrarían el botín. Descendieron del coche escoltado por los dos, abrió la puerta, encendió las luces, retiró la mesa camilla y bajo la trampilla de ésta sacó tembloroso dos cajas. Se les iluminó la cara, le retiraron de un golpe y como posesos se pusieron a toquetear manojos y manojos de billetes; mientras habían abandonado sin darse cuenta sus armas, enseguida por el volumen de los fajos se percataron que en una había más que en la otra caja,

-Esta para mi, no para mi....y así se enzarzaron en una trifulca.

Mientras Nico recobraba su fuerza y viveza y se apropió de la pistola como un águila sobre su presa, disparó a uno de ellos que cayó fulminado mientras el otro se defendía con la navaja pugnando por alcanzarle, de pronto unas peladuras de plátano que había tiradas por el suelo junto con otros desperdicios hizo su trabajo, se escurrió dándose en la cabeza con el pico de una cómoda, se desnuco en un segundo.

Nico agarró el dinero y con sigilo salió por la puerta de atrás, ya afuera corrió hasta tomar un taxi que por fortuna pasaba por alli.

-Al aeropuerto por favor- suspiró cayéndole los goterones de sudor, en un pis pas vió la luz, en Miami será más díficil dar conmigo, pensó.


GREGORIO GIGORRO
Boceto para bandeja redonda
Serie ángeles
2019



En Aranjuez a 1 de diciembre de 2019