domingo, 5 de noviembre de 2017

La fuente


Ahora casi todo se hace para usar y tirar, los alimentos suelen ser atractivos para la vista pero insulsos para el gusto; las relaciones humanas cada vez son más difíciles, poco comprometidas  y menos duraderas. La mayoría de las intervenciones del hombre se planean a corto plazo: las carreteras, las leyes, las obras de cualquier índole suelen ser pacatas, gratuitas, provincianas, sin lustre ni fuste.

A nadie se le pasa por la cabeza realizar algo sólido, útil, que transcienda en el tiempo, que podamos seguir utilizando en la actualidad, como el Derecho Romano, pongo por caso.

Hace tiempo, un puente moderno estaba sufriendo "mejoras" en su estructura, una indicación decía así: "Atravesar el puente romano en vez del de hierro"; los ejemplos son copiosos en este sentido. Les voy a transcribir lo que leí en una fuente en la cual se habían colocado dos leyendas, la primera en latín y más abajo otra en castellano, después de estampar los nombres de los benefactores de la obra se podía leer: "Se condujo hasta aquí el agua, se construyeron ésta y la más cercana fuente, se reparó el puente de Alcántara y se hermoseo el próximo delicioso paseo de árboles, para mayor comodidad y recreo del público, para ilustre ornamento de la patria, para monumento del buen gusto. Año de 1786", es decir bajo el reinado de Carlos III, dicha fuente se encuentra a las afueras de Toledo, sigue existiendo, continua cumpliendo la función para la que fue creada.

¿Nosotros en qué vamos a contribuir para mejorar nuestro mundo?, ¿qué va a quedar en pie, si cada dos por tres hay que arreglarlo?

Quizá deberíamos rastrear en nuestra historia sin ir más lejos, a buen seguro existen claves aprovechables para elegir lo mejor y adaptarlo a la actualidad, porque para peor siempre lo ha habido.

Convento de las Concepcionistas
Toledo

En Aranjuez a 5 de noviembre de 2017



¿Y tú, qué crees que podríamos aprovechar de nuestra historia para trasladarlo al momento actual?

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