jueves, 17 de noviembre de 2022

De armas tomar

 A principios del siglo XVI aparece en escena una mujer de nombre Malinche durante la conquista de México acaecida en 1521 por Hernán Cortés, era un indígena que gracias a su belleza, una despierta inteligencia y el dominio de varios idiomas llamó la atención de los conquistadores.

Se sabe que nació en Veracruz pero no la fecha, fue vendida en varias ocasiones como esclava, su padre al contraer segundas nupcias debido a la díficil relación con su madrastra marchó del hogar paterno, tenía 19 años cuando se produjo la conquista; ella junto con el religioso Jerónimo de Aguilar colaboraron con los españoles como intérpretes para las relaciones con los indígenas.

En toda conquista desde tiempo inmemorial, abría que remontarse a los imperios de oriente continuando con los griegos y los romanos, los hombres formaban parte del botín, por lo que la esclavitud era normal, por lo cual se esclavizaron a los aztecas, después se les bautizaba, pues la evangelización era prioritaria para España y más tarde entregarles en según que casos a oficiales o militares del ejército, ella fue entregada al capitán Portocarrero con quien se casaría, pero al tener éste que marchar a la metrópoli no le acompañó, como quiera que las relaciones entre Malinche y Cortés se estrecharon, el roce hace el cariño hasta tal punto que llegó a ser la amante del éste dando como fruto a Martín, el primer mestizo hijo bastardo de la pareja ya que el conquistador estaba casado, lo que no impidió que lo reconociera como hijo, un hecho reseñable que se ratificaría con la Real Cédula de Carlos V en 1541 por la que se autorizaba los matrimonios entre españoles e indígenas.

Más tarde se establece en la ciudad de México casándose con Jaramillo, otro militar que sabía de la relación íntima con su jefe, a buen seguro que a cuenta de este hecho se produjeron más de un altercado entre ellos. Se dice que murió de viruela pero no consta en ningún registro y es raro siendo su marido el alcalde de la ciudad; otros piensan que su vida se alargó más, creyendo que marchó a España concretamente a Valladolid donde al parecer estaba su hijo.

Pues bien, partiendo de este personaje como puente entre dos mundos, esa mujer que tomó el nombre de Marina al ser bautizada ha inspirado a Nacho Cano a estrenar Malinche, el musical, después de diez años de trabajo sin descanso y no exento de trabas, protagonizada por un elenco estupendo y numeroso formado por actores, bailarines, cantantes, músicos y un largo etc, sin olvidar todo el cuantioso cuadro de eléctricos, escenógrafos, montadores, figurinistas, en fín un sinfín de personas para hacer realidad este proyecto de envergadura. Donde se cuenta un momento de la historía española que pretende destacar uno de los tantos personajes ilustres que ha dado nuestro país en el que hay muchos de donde tirar, quiere dar una visión distinta de la historía conjugada con un espectáculo rabiosamente actual a la vez donde uno puede aprender, entretenerse y en definitiva disfrutar.

Los rigores netamente históricos son más propios de un señor como López Linares que ha realizado un magnífico documental sobre la primera globalización.

Cano, artista de renombre en todo el mundo sabe lo importante que es el arte y su difusión, además de la experiencia que adquieren los integrantes del reparto al participar en un proyecto de este nivel, importante para el trabajo de estos y su prolongación en el tiempo.

Comprendo que haya críticas, nunca llueve a gusto de todos pero éstas deben de ser constructivas y menos quisquillosas, es curioso que cuando vamos a ver otros musicales como Mamma mia o Billy Elliot, no somos tan exigentes, a veces pienso que es por el mero hecho de venir de fuera, se diría que les libra de todo, "son perfectos".

Demasiadas zancadillas se ponen a personas que intentan montar algo, sea un espectáculo, una empresa o qué se yo, Malinche es una buena oferta cultural en Madrid, no la única pero sí la última que puede atraer a muchos visitantes y eso no es moco de pavo; cuando una persona asiste a cualquier evento debe usar el transporte individual o colectivo, suele comer algo antes o después, existe la posibilidad de comprar una prenda, un paquete de tábaco, tomar un café, una copa, mil cosas.

Tanto los que hacen posible que el telón suba para que los artistas hagan su trabajo y el público pueda disfrutar de ello, absolutamente todos quieren vivir.

Así que viva Malinche, el musical y todos los musicales, las obras de teatro, de cine, las exposiciones, todas las actividades y muchas más para que todos podamos seguir viviendo sin dejar de soñar.

GREGORIO GIGORRO
Retrato de Isabel
Tinta y óleo sobre lienzo
Firmado y fechado en 2010
Medidas: 27 x 21,5 cm



En Aranjuez a 18 de noviembre de 2022




domingo, 23 de octubre de 2022

Tánger

 

El aroma de la hierbabuena inundaba la bañera antigua varada en la terraza llena de mesas, de sombrillas recogidas; los trinos de los pájaros saltaban entre las airosas palmeras, se asomó a la baranda de balaustres blancos impolutos, un gato paseaba,  la Medina también lucía el mismo atuendo, salpicada de alminares, al fondo la raya azul del Mediterraneo, a la derecha en la lejanía el cabo Malabata sobre los montes poblados, abajo en la plaza el bullicio de los coches, de la gente, las tiendas tan numerosas como abigarradas.

El sol le acariciaba la cara, pensó que se llevaría las sonrisas de la gente, el cuscús tan delicioso que tomaron ayer, las miradas francas, los apretones de manos, el sabor del té en la terraza del café Colón, el atardecer sobre las tumbas fenicias, los olores de las especias, el paseo descalzos al borde de la playa, los caballos, los camellos, el baño tempranero en la piscina solitaria, solo para nosotros.

Es imposible para mí, saber qué es lo que más me gustó de Tánger. Esta hermosa ciudad cuyo origen se remonta hasta los fenicios, ocupada después por los romanos, en el siglo X  el califato cordobés sentó sus reales para controlar el paso del estrecho; no hay que olvidar que su situación geográfica es estratégica, situada entre el Atlántico y la entrada al Mediterraneo con Gibraltar frente a su bahía. Más tarde llegaron españoles, portugueses...y mucho más fue un protectorado franco español, hoy forma parte del Reino de Marruecos; por todo ello los sucesivos pobladores han dejado su huella visible hasta nuestros días.

Fue nido de espías a principios del siglo XX, residencia ocasional de artistas como Matisse, Van Dongen o Tenesse Williams por citar algunos personajes ilustres que se sintieron fascinados por el lugar.

Porque su ambiente rezuma aún esa mezcla sugestiva de África frente a Europa, esa coexistencia entre el cristianismo, el islam y el judaismo, todo ello bañado por una luz clara que lo inunda todo.

Imposible en tan poco tiempo guardar todo lo sentido, saborear sus olores, la plasticidad de sus tiendas en la Medina, los atardeceres en el café Hafa frente a la costa española, pasear sin rumbo por la Kasba y después descubrir el famoso jardín de Dar Mabrouka, residencia de Ives Saint Laurent, ahora  en camino de convertirse en un hotel.

Recorriendo sus calles se palpa la herencia española, en el maltrecho teatro Cervantes, las escuelas Pías, el Hotel Continental o multitud de manzanas de casas que recuerdan a la cercana Andalucía, conviviendo con St. Andrews, templo inglés o el Gran Hotel Villa de France que habla del país Galo, sin olvidar el cementerio judio con una preciosa vista sobre el paseo Mohamed VI y el puerto deportivo amén de un montón de mezquitas y alguna sinagoga, lo que confirma el carácter internacional de la ciudad, más allá se desparraman por su bahía innumerables construcciones modernas y villas de veraneo porque Tánger es una urbe en crecimiento dotada de infraestructuras nuevas, cuya población ya sobrepasa los tres millones de almas.

Desde la azotea del hotel las luces iluminan todo el caserío, la llamada a la oración llega hasta el último rincón, el aire suave mueve las palmeras, el ferry procedente de la península está a punto de atracar; ellos se despiden y
sin decirse nada, sienten que todavía no se han marchado y sin embargo ya están pensando en volver.


GREGORIO GIGORRO
"La terraza del Gran Hotel"
Acrílico y tinta sobre cartón
Medidas: 40 x 30 cm
Firmado y fechado en 2022

En Aranjuez a 23 de octubre de 2022



miércoles, 19 de octubre de 2022

La mejor arma

 

Es algo útil pero no se puede adquirir en ninguna tienda ni centro comercial, la puede tener todo el mundo sin distinción de clase, género, edad, desde un bebé hasta la persona más longeva y en cualquier lugar del planeta; siempre ha existido y nunca morirá, pase lo que pase; además es privativo de los seres humanos igual que la fantasía.

No está sujeta a ninguna moda, ni modo de vivir así que siempre va a la última, está presente; si la tienes la puedes compartir con el de enfrente o con la persona de al lado, con los vecinos del quinto, también con los de abajo.

¡Ah no se necesita saber ningún idioma!, te relaja, rejuvenece, hermana sin ser familia, tampoco produce enfermedad alguna, ni es letal; no hace daño a nadie, al contrario.

Bueno, a estas alturas, tengo que decirles por dar un dato que empieza por s, no es soso ni mucho menos salado, tampoco es dulce... ¡Es la sonrisa!, hermana de la risa y la carcajada. La mejor arma que desarma al más pintado, siempre acompañada de la mirada sencilla, firme de quien la da, no cotiza en bolsa pero es un valor seguro que abre las puertas de cualquier encuentro o relación, es la mejor carta de presentación.

Sonreir, reir es mejor que llorar y si la vida es una obra de teatro que siempre acaba mal, para qué nos la vamos a tomar en serio, mejor hacerlo con humor a raudales, porque vivir son cuatro días.


GREGORIO GIGORRO
"Mírame"
Acrílico sobre cartón
Firmado y fechado en 2013
Medidas: 60 x 39,5 cm


En Aranjuez a 19 de octubre de 2022


lunes, 10 de octubre de 2022

Ascensión (Continuación)



Cruzaron la calle sorteando los charcos y los coches que la surcaban en ambas direcciones, la lluvia no cesaba, el cielo era plomizo salpicado de oscuros nubarrones.

Abrió la puerta de La Rosa del Azafrán, así se llamaba el bar, cediéndole el paso ella agradecida esbozó una sonrisa; al entrar el calor les dio de sopetón en la cara, estaba atestado de gente que venía a trabajar al lugar, las voces se oían subidas de tono mientras el camarero no paraba de servir a los parroquianos, hombres en su mayoría.

Se sentaron en la única mesa libre, pegada a la ventana, los cristales chorreaban sin descanso. Enseguida llegó el chico limpiándola con rapidez, mirándole con voz sonora le dijo- ¿Lo de siempre Genaro y la señora qué va a tomar, igual que el señor? ´-Le advierto que aquí los churros y las porras son de categoría- y le responde ella-Ah pues yo los quiero probar-

-Entonces Miguel tráenos dos cafés con leche y seis porras-

-A la orden don Genaro-le respondió el chaval.

-¿Qué hace una mujer como usted por estos andurriales?

-Recurrente respuesta, a lo que ella respondió lo que leyó en aquel periódico olvidado, ¿Quiere bajar de cinco a veinte kilos?

Genaro soltó una carcajada bien sonora al escuchar la razón de "la visita"

-Verá, estaba hasta la coronilla de buscar personal para la descarga de camiones que afortunadamente va a más y se me ocurrió la frasecita de marras, de veras que siento el equívoco.

Ella le miraba y después de un breve silencio le respondió resuelta.

-Mire Genaro no hay mal que por bien no venga, aquí estamos dos desconocidos sentados, la vida sigue y la verdad me parece una buena ocurrencia la que usted ha tenido, por cierto, ¿Ha conseguido lo que perseguía? a lo cual apostilló -Estamos en ello-

Las porras y los churros estaban muy ricos, el cielo seguía haciendo aguas, de pronto el móvil de Genaro sonó con insistencia, sus obligaciones le reclamaban; se despidieron con un apretón de manos volviendo a disculparse por lo sucedido a lo que ella le repitió-Nos volveremos a ver en otras circunstancias- Eso espero, dijo él.

Transcurrieron dos meses de aquello, por desgracia un operario sufrió un fatal accidente, Genaro como jefe que era se marchó a dar el pésame a la familia, en la sala donde se encontraba vió a una señora de espaldas que hablaba con los allegados del difunto, al acercarse ella se volvió, era Ascensión sin duda pero manifiestamente cambiada.

¿Pero qué hace una flor fuera de su maceta?, Ascensión esbozó una sonrisa-¡Genaro, qué sorpresa!, ¡Por Dios me va usted a sonrojar!-le dijo con cierta timidez.

GREGORIO GIGORRO
"Pepi y el pez" (fragmento)
Acrílico sobre cartón
Firmado y fechado en 2013


En Aranjuez a 11 de octubre de 2022



domingo, 25 de septiembre de 2022

El último viaje

Los últimos arreboles de la tarde iluminaban el velero, que él manejaba como pez en el agua, ella le miraba complacida, saludándolo, recibiendo igual respuesta; el barco se aleja deslizándose a lo largo del mar, serenamente sin prisa ella se sumerge lentamente en su sueño.

Suena el teléfono-Dígame- preguntan por él, continúa al otro lado una voz ronca-Sus padres han sufrido un grave accidente, le indica la misma voz adonde tiene que dirigirse. Cuelga el teléfono, frío, pasea por la habitación, se da la vuelta, titubea, hace una llamada a su hermana, no sin antes de respirar profundamente, -Inés, soy Juan- Si te he reconocido, ¿Qué tal?- Bien- le responde secamente- se oyen a lo lejos voces infantiles y música barroca.

-Dime, le dice ella- Pues verás.. me acaban de telefonear..., tose, titubea..., nuestros padres han sufrido un serio accidente- ¿Han muerto?, -Mujer no digas eso..., espero que no, por favor ven lo antes posible.

El matrimonio se dirigía a su casa desde Toledo, ciudad que les encantaba, aquella tarde habían paseado sin rumbo fijo después de haber tenido una cita de trabajo; se les hizo de noche, muy habitual para ellos pues llevaban tiempo tomándose la vida de una forma relajada aunque él seguía resistiéndose de su operación en el ojo derecho, no obstante con frecuencia decía: "Por quejarse no desaparecen los problemas".

El caso es que les fascinaba ver la ciudad iluminada desde la Virgen del Valle o desde El Parador, siempre era una fiesta para la pareja.

El conjunto monumental se lo sabían de memoría, igual que sus hijos, pues desde pequeños era frecuente encaramarse a la baranda y recitar los nombres de los monumentos a cambio de un refresco, así que podría conducir como quien dice con los ojos cerrados para llegar a disfrutar de esa vista aunque él seguía siendo prudente.

Tomando una curva se encontró de bruces con una ambulancia a toda velocidad, por esquivarla y sin contar con la falta de reflejos que quita el tiempo, su vehículo saltando el quitamiedos se precipitó por el barranco dando unas cuantas vueltas de campana, incendiándose acto seguido para acabar completamente hecho un amasijo de hierros calcinados al borde del Tajo.

Esa fue la explicación recibida, -Ah, su madre iba durmiendo mientras que su padre se quedo ciego un segundo antes; es todo lo que les puedo decir-, -añadió el empleado, entregándoles los objetos personales que se salvaron de la quema.

La misma ambulancia ante tal estruendo de llamas dio la vuelta pero no se pudo hacer nada por los ocupantes del coche siniestrado.

La ciudad seguía iluminada y el firmamento preñado de estrellas.


GREGORIO GIGORRO
Retrato de Isabel
Conte y carboncillo sobre papel Canson 
Firmado y fechado en 2007

En Aranjuez a 25 de septiembre de 2022

sábado, 17 de septiembre de 2022

Demasiado corazón

 Se puede vivir de diferentes maneras y morir de otras tantas, el caso que nos ocupa yo creo que su final fue debido al éxito. 

Hugo Koblet de nacionalidad suiza, fue una estrella del ciclismo europeo en los años 50, disfrutó del triunfo y éste le embriagó. Él, con el tesón que conlleva este deporte sin excluir a otros, por el que siento particular admiración, destacó sobremanera en poco tiempo.

Fue un hombre que llamaba la atención por su belleza, educación y elegancia dentro del ciclismo, cosechó numerosas victorias, siendo malogrado por la aparición de un forúnculo en las nalgas, solventado por la intervención de un médico, el cual le recetó supositorios de cocaína; en aquella época no estaba mal visto que los deportistas tomaran estimulantes, de resultas de lo anterior siguió ganando, no obstante se embarcó en una vida de lujo y desenfreno donde abundaban las villas costosas, automóviles despampanantes, viajes..., en uno de ellos a México contrajo una enfermedad venérea que le cambió la vida aunque para mantener el alto nivel del que disfrutaba siguió trabajando y ganando; abrió negocios que tuvo que cerrar, se endeudó, las broncas con su mujer eran canela fina, por citar algunos problemillas.

Se retiró en 1958 y el 11 de noviembre de 1964 llegó a la meta a la que todos tarde o temprano estamos abocados, estrellándose con su flamante Alfa Romeo, pero no murió en el acto, antes de  expirar contó a los presentes haber visto una sombra humana que trató de esquivar; misterioso e inquietante, verdad. Tan fatal accidente sigue sin esclarecerse ya que no había huellas de freno y la carretera estaba seca.

Morir joven, guapo y famoso abre las puertas de la inmortalidad, sino que se lo digan a James Dean que habiendo interpretado tan solo tres películas, muriendo en un accidente de coche también, subió al Olimpo; quizá porque en Estados Unidos andan faltos de personajes ilustres en su corta historia, vivir para ver, en España dichos personajes abundan a porrillo, desde Viriato y antes hasta Picasso pongo por caso, en todas las ramas de la existencia humana es evidente que multitud de hombres y mujeres en nuestro país han influido poderosamente en el devenir de esta tierra y del resto del mundo, no todos los países pueden decir lo mismo, porque todo el monte no es orégano.

GREGORIO GIGORRO
Ciclista
Bolígrafo sobre papel
Septiembre 2022


En Aranjuez a 17 de septiembre de 2022


martes, 13 de septiembre de 2022

Las cosas del querer

Aturdida por las preguntas del comisario, Marta respondía con los ojos llorosos, no imaginaba el lío en el que se había metido; sus padres escuchaban boquiabiertos el relato de su hija.

Ella ante lo poco que avanzaba su relación con un compañero del instituto, algo menor que la muchacha, dieciséis años para más señas tenía Álvaro, Marta decidió inventarse un rapto, creyendo así captar la atención del muchacho.

Sus padres estaban de viaje siendo ella mayor de edad, hija única, contando con la confianza de estos, la dejaron sola, total tardarían unos ocho días en regresar. 

Poseían un apartamento que había estado alquilado precisamente por un estudiante pero al encontrar trabajo en otra ciudad decidió prescindir de ese alojamiento, allí se escondió la chica y comenzó a enviar wasap a su compañero, alertándole de la situación en la que se encontraba, el chico se asustó ante lo que Marta le relataba, hasta tal punto que pidió ayuda a la policía, ella en su ceguera, no tuvo en cuenta o quizá por desconocimiento que se podía geolocalizar a cualquiera si además se trata del cuerpo nacional de policía, para ellos la cuestión era pan comido, ni que decir tiene que fue muy fácil pillarla.

Ahora en presencia de sus padres, Marta estaba abochornada, jurando y perjurando que se iba a entregar, para parar esta broma pesada, porque ella había notado a Álvaro muy alterado, sus padres hicieron lo imposible como es lógico por mitigar la situación, como no tenía antecedentes penales además de ser una estudiante notable, todo ello dio pie a que la autoridad mirara para otro lado.

Por otra parte se dio la circunstancia de que al padre del chaval le destinaron a otro país porque éste había ascendido de puesto en la multinacional para la que trabajaba, al final la familia al completo cambió el sol y los paseos mirando al Mediterráneo por la bruma grisácea y el frío de una ciudad del norte del viejo continente.

Como suele decirse, nuestra chica se quedó compuesta y sin novio, aunque con dieciocho años la vida seguro que tenía mucho que depararle.


Fotografía cedida por Isabel Gigorro
Agosto 2022


En Aranjuez a 13 de septiembre de 2022